Yo amo, ¿tú amas?

"Amar no es cuestión de lo que pasa en la vida. Es un asunto de lo que está pasando en tu corazón", Anónimo

viernes, 13 de septiembre de 2013

En tu memoria (supongo)

Necesitaba escribir supongo...
 
Bueno no tengo ganas de casi nada, pero esto lo necesitaba...
 
Ahora todo parece triste y sin sentido. Triste como el imperceptible sonido de las hojas al caer cuando llega el otoño, triste como presenciar como un incendio lo devasta todo, como la escarcha devorando las flores en invierno y sin sentido como pronunciar una palabra una y otra vez, como la extraña sensación que producen las puestas de sol en la playa o el ruido que hace el viento entre los edificios y que pone la piel de gallina. Pero no es así como me siento, no, yo me siento como si todas esas cosas agitasen mi cuerpo una y otra vez, en silencio y sin previo aviso.
 
Siento que ahora que tú te has ido, ahora que he tenido que presenciar como echaban tierra sobre lo que antes fue una persona alegre, de risa contagiosa y tan amada, ahora todo es diferente, ahora me pregunto cuantas veces mas tendré que pasar por esto y ver como el tiempo lo destroza todo, cuántas veces más tendré que despedirme y odiar todo lo que me rodea, porque ahora ya no aprecio nada, debo decirlo, ahora todo me parece estúpido y frio, apagado y al fin y al cabo todo lo que ame, todo lo que construya con esfuerzo y cariño, todo, será finalmente destruido.
 
Ni siquiera el amor mas grande podría terminar con todo el dolor que siento ahora mismo, nadie...
Estaría bien tener alguien a quien culpar, alguien a quien odiar, pero no puedo evitar odiar a todo el mundo con sus consuelos banales, con sus frases aprendidas de algún guión de película con poco presupuesto, con esos ojos que miran con pena mientras a mi la pena me desborda en todas direcciones como pequeñas agujas.
 
No, no quiero hablar, porque no hay nada que me puedan decir, simplemente prefiero mantenerme lejos de todos aquellos sentimientos que me resquebrajan y sí, sigo prefiriendo llorar a solas sin nadie que me consuele. Porque no hay consuelo alguno que puedan dar.
 
Ojala yo me hubiese marchado con él.
 
Te quiero y te echo de menos, ojala nos viésemos pronto.